El Valle del Cauca no sale del asombro luego de que un hombre llamado Jhon Jairo Manyoma, con historial de drogadicción y problemas psiquiátricos, lanzara a su hija Salomé desde el tercer piso del hogar donde habitaban. Todo habría comenzado con una disputa con su esposa.
El hombre no sólo lanzó a Salomé, quien falleció a las pocas horas, sino que habría intentado arrojar también a otra de sus hijas, pero afortunadamente los vecinos pudieron evitarlo. Los residentes del conjunto Unidad Residencial Torres de Alamadina lo golpearon de tal manera, que el hombre también falleció horas después en la Fundación Valle de Lili de la ciudad de Cali.
La comunidad en Jamundí, Valle, vive momentos de consternación tras la muerte de Salomé Manyoma, una niña de 5 años que fue lanzada desde el tercer piso del conjunto residencial Torres de Alamadina por su propio padre.
La menor fue llevada de urgencia a la Clínica Valle del Lili en Cali, donde pese a los esfuerzos médicos falleció en la madrugada del martes.
El responsable del hecho, quien también sufrió heridas tras ser agredido por la comunidad indignada, fue trasladado al mismo centro asistencial bajo custodia policial.
El episodio desató el caos en el lugar, obligando a las autoridades a intervenir para controlar a los residentes, quienes dañaron varios vehículos en medio de su enojo.
“La administración municipal repudia profundamente este acto y hacemos un llamado a la protección integral de los niños. Es una tragedia que no podemos permitir que se repita”, expresó la alcaldesa de Jamundí en un comunicado oficial.
Las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer los motivos detrás de este lamentable suceso, que ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de los menores en situaciones de conflicto familiar.
Las autoridades han anunciado que quienes lincharon al asesino de Salomé también tendrán consecuencias legales y qué tan grave como el crimen, es la justicia por mano propia que en este caso lo sucede.
Al caer la pequeña Salomé tuvo graves daños en sus ojos y costillas de los cuáles no pudo reponerse, fue en particular una vecina de la familia, la que pudo interceder para el hombre no acabara también con la vida de la hermana de la pequeña.
La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, repudió el hecho e instó a que este hecho sea el punto de partida para lograr mejores condiciones para los niños y niñas de Colombia: «“La pequeña Salomé es una víctima inocente más de los monstruos asesinos de niños a quienes tenemos que excluir de la sociedad», remarcó.