Un nuevo hecho de violencia se registró este martes en la Universidad del Atlántico, donde personas no identificadas incendiaron las oficinas de la Vicerrectoría de Investigación, Extensión y Proyección Social, área a cargo de Miguel Caro, representante de las directivas académicas ante el Consejo Superior. Durante el ataque también fueron pintados grafitis y quemados pendones pertenecientes a uno de los aspirantes a la rectoría, lo que refleja el clima de tensión que atraviesa la institución en medio del proceso electoral.
El ambiente universitario se ha visto alterado desde el inicio de la contienda por la rectoría, en la que participan Danilo Hernández, Álvaro González, Leyton Barrios, Wilson Quimbayo y Alcides Padilla. Aunque estos cinco candidatos fueron los más votados en la consulta interna, el Consejo Superior no ha podido concretar la elección definitiva debido a múltiples recusaciones que obligaron a suspender la sesión prevista para el 10 de octubre.
Fuentes cercanas a la comunidad académica señalan que la tensión ha ido en aumento por la falta de consenso dentro del Consejo y las presiones externas que rodean la designación del nuevo rector. Algunos sectores advierten que los recientes hechos violentos podrían estar relacionados con intereses políticos y disputas internas que buscan influir en el resultado final del proceso.
Hasta el momento, las directivas de la Universidad del Atlántico no se han pronunciado oficialmente sobre lo ocurrido, mientras las autoridades locales evalúan los daños ocasionados y avanzan en las investigaciones para identificar a los responsables del ataque. El hecho ha generado preocupación entre estudiantes, profesores y trabajadores, quienes piden garantías de seguridad y transparencia en el desarrollo del proceso electoral.
